A las 15:30 de la tarde, después de hacernos el
correspondiente reportaje fotográfico bajo el Acueducto segoviano, el
elegante taxi parte sin dilación rumbo noreste camino de Francia.
La preciosa “mercedes”, amplia y muy cómoda, ha venido a buscarnos desde
Pamplona y nos acercará hasta el Sur de Francia, nuestro punto de partida
de este nuevo Camino.
Bajo el Acueducto segoviano
El viaje transcurre sin incidencias mientras comentamos algunas anécdotas
de Caminos pasados. La tarde es limpia, soleada y agradable. Ángel, sin
impacientarse, aprovecha para preparar una a una las cámaras de algunos
compañeros que tienen problemas con su programación, con el
fin de poder colocar después las fotos por orden de fecha y hora de la toma,
cosa que simplifica enormemente su posterior clasificación y publicación.
Después de una breve parada cerca ya de Pamplona donde el taxista reposta
gasolina mientras nosotros tomamos unas cervezas, continuamos viaje hacia
nuestro destino.
Mientras cruzamos las ricas tierras pamplonicas el
taxista nos explica la forma de recoger los espléndidos espárragos, nos
comenta sobre la actualidad política en referencia al País Vasco y nos
informa sobre la fuerte subida que efectuaremos mañana desde Saint Jean
Pied de Port hasta Roncesvalles.
Cerca ya de las nueve de la noche, aún de día, llegamos
a Saint Jean Pie de
Port, donde saludamos a Beni, amiga peregrina procedente de Toledo que
habíamos conocido algunos años antes en el Camino gallego, acompañada por
Marcos, brasileño que ha conocido en Roncesvalles y que comienza también
el Camino al día siguiente.
Beni y Marcos
También nos está esperando Javier, segoviano hermano de nuestro
amigo y compañero Pedro, que vive desde hace años en Saint Jean y a quien
teníamos previsto saludar a nuestra llegada.
Poco después de acoplarnos en un albergue privado a
cambio de 10 euros cada uno salimos con intención de cenar algo. Javier nos
explica que los restaurantes cierran allí muy temprano y que la gente
acostumbra a irse muy pronto a dormir.
Con Javier
Compartimos en una terraza ensalada de lechuga, queso y
algunos pinchos de carne acompañados por vino de mesa y cerveza. Mientras
cenamos, conocemos a Marilyn, australiana que está buscando algún lugar
donde cenar algo. Resulta ser vegetariana, por lo que le ofrecemos la
ensalada, aunque la rechaza, mientras se va para su albergue.
Durante la cena
Es evidente
que nuestra camarera tiene prisa por cerrar el restaurante por lo que
poco después recorremos el precioso pueblo mientras
Javier nos comenta sus distintas facetas.
Al fondo, el logo de nuestras tarjetas de este año
Lugar de confluencia de tres importantes
rutas de peregrinación francesas e inicio del Camino de Santiago, Saint Jean
Pied de Port es un pequeño nucleo de población, fotificado en la Edad Media.
Sus calles antiguas, bordeadas de dignos edificios, la Iglesia y el viejo
puente románico, completan su atractivo cuadro.
La muralla
Después de un agradable paseo por la ribera del Nive
donde sus aguas
reflejan las casas en una estampa muy apacible, nos despedimos de Javier y
nos retiramos hacia el albergue.
Antes de dormir echamos un cigarrillo en la puerta.
La noche es estrellada y espléndida. Ya en la litera, aunque no
hay ronquidos, el reflector de luces de seguridad me da en los ojos y no
consigo dormir.
|