CAMINO DE SANTIAGO 2017
Sábado, 13 de Mayo de 2017
Etapa 8 - De O Cádavo a Lugo (30,5 kms)

Hoy se nos une el peregrino amigo y compañero de fatigas Luís Martín. Parece que nos ha reservado dos habitaciones dobles en el Hotel Mendez Nuñez en el centro histórico de Lugo (4 estrellas) a 30 euros por persona. Desayuno 6,60 euros. Tiene prevista su llegada a Lugo a las 19:30 horas.

Amanece despejado, cosa rara dadas las previsiones meteorológicas. Ángel a las 7:00 ya estaba preparado para salir. Había que aprovechar la circunstancia meteorológica. Salió a desayunar a uno de los bares cercanos que ya estaba abierto y a las 7:15 aproximadamente ya estaba en marcha. Primi y yo salimos más tarde y después de desayunar en un bar ya abierto comenzamos el Camino tras él.



Iglesia de Santo Tomé y su cementerio adosado; Souto de Torres


Como casi todos los días una buena cuesta arriba te hace entrar en calor y, a partir de aquí, el Camino llanea bastante e incluso se pronuncia cuesta abajo. En menos de 2 horas llegamos a Castroverde, donde hay todo tipo de servicios. Desde aquí, seguimos por la carretera, ya que es más fácil encontrar algún tipo de servicio, pues sabemos que por el Camino ya no hay nada hasta Lugo.



Cruceiro de Souto de Torres


Continuamos Primi y yo tras Ángel que debe ir muy adelantado. Después de varios kilómetros preguntamos a un muchacho en un pueblo si existe algún bar en el camino y nos comenta que existe una máquina expendedora de bebidas en la aldea de Gondar, pueblo muy cercano. Cuando llegamos a Gondar vemos un anuncio de la máquina pero esta no existe. La han desinstalado.

Una señora nos indica que unos metros más adelante hay un merendero instalado por la Xunta de Galicia que cuenta con agua, máquinas expendedoras de bebida y comida, cafetera, lavadero, horno microondas, mesa y sillas. Rápidamente nos acercamos al lugar y nos acomodamos en el merendero.



Merendero de la Junta en Gonzar


Mientras tomamos algunas cervezas y algún bocata van llegando algunos peregrinos que se nos unen. Javier, el peregrino asturiano, el grupo de italianas, las francesas hermanas, y algunos más. Otros peregrinos pasan de largo sin detenerse.



Javier, peregrino asturiano


Después de hora y media de descanso continuamos el Camino, ahora con buen tiempo. Poco a poco nos estamos acercando a la ciudad de Lugo. Javier viene ahora con nosotros. Personalmente, la etapa se me está haciendo demasiado larga. Por un paso elevado cruzamos la autovía y comenzamos el descenso por la periferia de la ciudad que nos lleva hasta el valle horadado por el río que la rodea. Tras cruzar un puente nos sentamos en un banco al lado del río sin ánimos de comenzar el corto pero duro ascenso al casco urbano. Estamos en el Barrio da Chanca.

Quedamos con Javier, que comienza la subida casi sin detenerse, en que nos llamará por el móvil cuando encuentre un bar o restaurante donde poder comer.



Cervecería Vinoteca "O Cincuenta e Seis"


Continuamos sentados en el banco hasta que poco tiempo después nos llama Javier. Ha encontrado un restaurante nada más subir en una calle bastante céntrica. Comenzamos la fuerte subida, pasamos bajo un puente por donde pasa la vía del tren, subimos una larga escalera y desembocamos, ya arriba, en la Ronda de Fontiñas, donde nos espera Javier en la Cervecería Vinoteca "O Cincuenta e Seis".



Comida con Javier




Comida en "O Cincuenta e Seis"


En el restaurante nos damos un buen homenaje para reponer fuerzas después de la larga etapa: zamburiñas, ensalada, pimientos de Padrón, calamares, todo ello acompañado por un buen ribeiro. Finalizada la comida, totalmente repuestos, salimos con intención de cruzar la muralla de la ciudad en busca del albergue de Javier y de nuestro hotel Mendez Núñez. Javier se va hacia su albergue mientras nosotros, siguiendo las indicaciones telefónicas de Ángel, llegamos al hotel.



La muralla de Lugo


Después de las duchas Ángel nos cuenta el desarrollo de su etapa desde que nos separamos esta mañana.

En el kilómetro 15 llego a un pequeño pueblo que se llama Arcos donde hay una tienda de ultramarinos que hace de bar, de estanco y de todo, porque son 4 caseríos sueltos por allí. Paro allí con intención de tomar algo pero la señora me dice que no tiene pan que hasta las 12:30 o así no llega el panadero por lo que me conformo con una bolsa de patatas fritas y una cerveza que me hace de tentempié para continuar el camino.

Nada más salir de Arcos empieza a llover y yo continuo por la carretera. Se me van haciendo largos los kilómetros y se me empiezan a recalentar los pies por lo que aproximadamente 5 kilómetros antes de llegar a Lugo me paro en un borde de la carretera para darme un poco de vaselina en el pie derecho que le notaba un poco cargado. Estando en ese trance un coche patrulla de la Guardia Civil pasa y me ve por lo que da la vuelta y vuelve para preguntarme si necesito algo. Les digo que no, que únicamente ha sido una parada técnica para dar un poco de vaselina en el pie; me dicen que continúe, que ya me queda poco para Lugo.

La entrada a Lugo por esta carretera se une en una rotonda con la A6 y a partir de aquí ya no es posible continuar los peatones por la carretera porque es una autopista. Hay un desvío que conecta con el camino, dando la sensación de que da muchísimas vueltas porque cruza una vez y otra vez la propia autopista, la siguiente carretera, etcétera.

Las señales del camino están pintadas unas veces con una X amarilla otras veces con una flecha amarilla otras veces con nada, lo que induce a confusión, así que me encuentro con un aldeano al que le pregunto si voy bien por aquí porque parece que esto es equívoco; dice que si, que están cambiando las señales y poniendo las nuevas indicaciones por eso están marcadas con equis o con flechas. Como todavía no veo Lugo le preguntó que cuánto queda y me dice que entre 1 km y km y medio. Empiezo a bajar una cuesta entre casas de aldeanos que ya entiendo que son las afueras de Lugo y veo los grandes edificios al fondo. La cuesta abajo se hace bastante larga. Al llegar a lo que ya parece más la ciudad hay un plano y me sitúo para saber dónde estoy.

En la Rúa de las Flores decido hacer una parada para comer algo y recuperar líquidos que me hacía muchísima falta. Tras cerca de media hora allí continuo avanzando en búsqueda del hotel Méndez Núñez que nos ha reservado Luisito. Vuelve a llover.

Tengo un pequeño incidente, porque en la recepción del hotel me dicen que la reserva de Luis Martín es para mañana no para hoy. No obstante me comentan que tienen habitaciones por lo que, en principio, no hay ningún problema.

Me da tiempo al aseo, duchas, siesta, etcétera, etcétera, hasta que a través de WhatsApp nos ponemos de acuerdo dónde están Michel y Primi y que Luisito llega sobre las 19:30. Cuando me levanto yo de la siesta llegan Michel y Primi. Les dejo en recepción y yo me salgo a tomar una caña. Paseo por la ciudad de Lugo, incluída la muralla, la Catedral y el casco viejo. Sigue lloviendo; a ratos muy intensamente.



La muralla de Lugo




La Catedral de Lugo


Sobre las 19:30 horas nos llama Luis, que ya está en la puerta del hotel; le informamos del asunto habitaciones. Nos sentamos en una terraza de la Plaza Mayor donde hay mucha actividad, mucha gente.



En la Plaza Mayor


Las hermanas francesas, que andan dando una vuelta, se acercan al vernos y toman un vino con nosotros. Después, cuando ya ha llegado Luís, nos vamos los cuatro por las calles del Casco Viejo, la Rúa Nova y la Rúa da Cruz a tomar otros chatos y buscar un lugar donde cenar.



Chatos en el bar "Las Cinco Vigas"


Cenamos en el restaurante al lado de Las Cinco Vigas a base de caldo gallego, pulpo, chipirones, etc. acompañado todo con ribeiro.

Pasadas las 11 de la noche nos vamos a la cama en un confortable hotel de 4 estrellas.